HISTORIAS DE UN CAMIONERO
Posted: 25 de agosto de 2010 by Zona Negra in
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Miguel es un camionero de más de 60 años, y nunca supo que estaba ofreciendo sus historias para "Zona Negra" porque, al mostrarse reacio a enfrentar un grabador, sus interesantes relatos fueron registrados por un aparatito de MP3 oculto.
Durante una extensa conversación, entre otras cosas narró: "yo venía de Andalgalá con mi mujer, en un camión grande, a las doce de la noche o una de la mañana, y entre Pajonal y Siján, adonde ahora hay fincas pero antes no había nada, veo un tipo en la noche, en la oscuridad, sentado en los pasantes, con un libro… lo empiezo a ver con la luz alta y le digo a mi mujer que mirara al tipo ese, y me dice ella que éste debe ser un tipo que está estudiando la magia negra o algo así…¡Mierda, pasé por el lado y sentí una cosa que…! ¡Pero el tipo ni me miró, nada! ¡El tipo estaba sentado, mirando el libro, y lo tengo tan patente! ¡En lo oscuro, y ni una casa cerca, nada, a la puta me dije, este debe estar estudiando la magia!"
Después Miguel recuerda una anécdota de uno de sus hijos: "uno de los changos grandes míos también andaba en los camiones, venía de Andalgalá, antes de entrar a La Cébila, a mitad de camino para Aimogasta, dice que se baja a tocar las gomas, solito en la noche, toca de un lado, da la vuelta a tocar las otras gomas del otro lado, cuando siente que le pegan en la carrocería del otro lado, se va hacia allí y le golpean del otro lado…
Durante una extensa conversación, entre otras cosas narró: "yo venía de Andalgalá con mi mujer, en un camión grande, a las doce de la noche o una de la mañana, y entre Pajonal y Siján, adonde ahora hay fincas pero antes no había nada, veo un tipo en la noche, en la oscuridad, sentado en los pasantes, con un libro… lo empiezo a ver con la luz alta y le digo a mi mujer que mirara al tipo ese, y me dice ella que éste debe ser un tipo que está estudiando la magia negra o algo así…¡Mierda, pasé por el lado y sentí una cosa que…! ¡Pero el tipo ni me miró, nada! ¡El tipo estaba sentado, mirando el libro, y lo tengo tan patente! ¡En lo oscuro, y ni una casa cerca, nada, a la puta me dije, este debe estar estudiando la magia!"
Después Miguel recuerda una anécdota de uno de sus hijos: "uno de los changos grandes míos también andaba en los camiones, venía de Andalgalá, antes de entrar a La Cébila, a mitad de camino para Aimogasta, dice que se baja a tocar las gomas, solito en la noche, toca de un lado, da la vuelta a tocar las otras gomas del otro lado, cuando siente que le pegan en la carrocería del otro lado, se va hacia allí y le golpean del otro lado…